Se trata de una proyecto que ha desarrollado Fabio del Percio. La idea es utilizar el heno que suele destinarse para alimentar el ganado para rellenar el interior de estos asientos. El puff y las butacas están hechos con vinilo transparente y, en su interior, restos de heno de Islandia (no sé si habrá alguna diferencia en el aspecto de los henos de otros países) para que puedas ver qué es lo que hay dentro que hace que los asientos sean tan confortables.
La colección de estos sillones eco-friendly se titula “Hey” y el forro de plástico dispone de unos agujeritos en la parte inferior a través de los cuales el heno puede respirar para que se mantenga fresco, así la sensación de sentarse en estas butacas o puff es aún más natural, convirtiendo estos muebles en accesorios perfectos para los amantes de la naturaleza y poderse sentar en heno sin ensuciarse ni sentir olores raras. Evidentemente, todo objeto innovador y de diseño tiene un precio. En este caso, los precios oscilan de las 275 libras a las 580.
Lo que más nos sorprende de la colección Hey de Fabio Percio es precisamente que el heno, un material que estamos acostumbrados a ver en el exterior, se convierta a una alternativa para rellenar objetos acolchados. Además, pueden dar ese toque de originalidad a la decoración de un hogar. Sin embargo, lo que no me acaba de convencer es el material del forro de las butacas y el puff, el plástico, creo que en meses de calor debe ser bastante incómodo, aunque, es cierto que permiten ver el relleno de su interior.
Via: www.monkeyzen.com
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